16 de abril de 2014

Abuelitos mios!!!

Quizás debí entender cuando se fue la Marta,
que no éramos tan especiales como pensaba...
o que lo éramos pero también simples mortales,
aunque ustedes fueran los seres más maravillosos de la tierra,
no solo mis abuelos,
sino personas divinas, lindas, generosas, amorosas, abiertos a todos, a los nueros o nueras de entraban, manteniendo el lazo con las nueras y nueros que salían.

Personas más lindas que ustedes pocas veces uno se encuentra
y yo tuve la fortuna de tenerlos como abuelos.
Mágicos abuelos,
cabecitas blancas desde que los divisé la primera vez,
tiernos, encantadores, simpáticos, singulares,
Titin y su Tango que menena, recitando poesía, con ese delicioso olor a colonia, talco y crema, que siempre pensé que era el olor de la gente mayor, de los abuelos, porque después la Ita Alicia, cuando nos volvimos a encontrar con ella en Santiago, también olía así.... siempre me quedó la duda si no era el aroma que despliegan los abuelitos.....

Mis abuelitos amados,
la dicha infinita que producía cuando llegaban a visitarnos a Guadalajara,
las caminatas, las tardes en su pieza en Bruselas,
los masajes que le haciamos a Titin,
cuando ayudábamos a la Marta a cocinar, meter todos los dedos a los guisos y que nadie te retara, chupeteartelos y volverlos a introducir y ella preguntara "¿esta rico mijita?", claro que estaba rico, más bien delicioso........ tus papas a la guaicaina no se encuentran en Perú Marta, el Chimbo farso nadie lo hace como tu, las Sarsas no son espesas como las tuyas, los platos no son generosos y abdundantes como los que le servías a mi papá.

Arturo Claro ya no existe,
tampoco la Isla,
ahora que volví a Guadalajara, tampoco está como antes la casa de Bruselas, la de Gregorio Dávila se la comieron las monjas, no queda nada, nada, nada.........
Por suerte permanece la memoria,
los latidos del corazón cada que pienso en ustedes, que miro sus fotos, que aparecen como fondo de pantalla en mi computador y rememoro lo bella que era la vida junto a ustedes.
Ahora que volví a Guadalajara,
pasee mucho pro Chapultepec, que tampoco está como antes, de hecho está mejor porque patinar como lo hacíamos antes junto a ustedes, es más fácil, no hay peligro de morir atropellada porque es casi todo paseo peatonal........ pero no están ustedes y tampoco nosotros.

A veces me pregunto cómo habría sido mi vida si no fuera tan ingenua,
tan marciana, si hubiera entendido ciertas cosas de la vida antes,
una parte de mi siente que sería hace 45 años una amargada,
en cambio, tengo el placer de haber tenido la mejor infancia,
los mejores papás, los abuelos más maravillosos del mundo,
creía hasta que se murió mi mamá que éramos inmortales, además de ser los seres más espectaculares que el universo había creado........ todavía siento un poco lo segundo, lamentablemente ya no lo primero porque no están ustedes, ni mis papás, el consuelo que  me queda y al que no le tengo miedo, es que algún día será mi turno y podré reencontrarme con todos ustedes.

Mientras tanto todos los hoy recordaré que se murió la Marta el día del cumpleaños de mi querido Titin........ fue una manera chapusona de tu queria Martoca de jalarte las orejas por última vez, pero también hacerse inolvidable, imborrable en tu memoria y qué decir en la de todos nosotros.
Los amo abuelitos míos!!!

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