27 de diciembre de 2018

Soñar contigo.

Seguiré soñando contigo,
ahora que con solo invocarte,
llamarte hasta mis sueños,
mirar tu foto
viajas junto a mi,
con rumbo a ese mundo que es solo mio, que es solo nuestro.

Aquella realidad en la que somos tu y yo,
solos nada más,
juntos muy juntos,
donde me amas, nos amamos.

No dejo de preguntarme ¿Por qué te sueño? ¿por qué? ¿quién eres?
Yo sé quién eres,
como también creí que sabías de mi,
pero tu cumple dejó en claro el error,
aunque....

Aunque me mires en la calle,
me hagas caras y morisquetas,
aunque....

Pero están los sueños,
las ensoñaciones donde vuelves a mi,
yo a ti 
y construimos un mundo, un amor, una vida, maravillosa.

Como anoche,
como tantas otras noches,
en las que después de mirar tu foto y pensarte..... 
vuelves a mi.

Quedarse a solas.

Ayer sentí una pulsión como de ahogo,
pensé ¿qué podría ser?
Nuevamente pensé y pensé, hurgando en bolsos y baúles, en carteras y mochilas, hasta que lo encontré.

Alguna vez tuve muchos amigos,
logré llenar una mesa tanto más larga que la del comercial de Té Club,
alguien los contó y dijo que éramos 50, entre amigos y familiares.
Hoy no alcanzaría a llenar ni un cuarto de espacio si quiera.

Una parte de mi, siente tristeza por esa situación,
no tanto por la sensación de soledad,
porque a solas siempre estoy, al nacer, cada que me duermo y después despierto, en mi trabajo, al caminar, escuchando música y leyendo.
No le tengo miedo a mi eterna compañera o compañere,
llamada soledad, a solas,
es más la pena de constatar y recordar que esas personas no eran reales, los sentimientos no eran mutuos.

Ninguno de ellos,
aquellos con los que me sentía protegida,
tanto como en las casas bajo la mesa del comedor, o arriba de mi cama, que construía de chica y que mi papá decía que era el útero de mi  madre, al que quería volver.
Esa sensación de calidez, protección,
que pensé tenía, que pensé sentir,
el día que enterramos a mi mamá,
en compañía de todos aquellos que hoy ya no están,
ese día creí sentirlo y ese día se esfumó.

Todes aquelles no están desde hace mucho tiempo
y su desmemoria,
late en mi corazón con furia, fiera, coraje, que hierve mi sangre,
entonces los lanzo a volar,
volar lejos, más lejos de lo que ya están,
abriendo puertas y ventanas, aprovechando el viento, viento poderoso,
que se los llevo como plumas, livianas plumas, lejos, lejos de mi.


Lejos quedaron,
algunos ni se enteraron,
porque la impunidad es así,
ciega, egoísta y sorda.

No me arrepiento,
nunca lo he hecho,
asumo lo hecho y sigo pa delante,
aunque a veces... como anoche, como ayer, como hace unos ayeres atrás...
constato la realidad,
esto de saber que la Colomba capaz de reunir a 50 personas,
ya no existe.

No existen ni las cincuenta personas, tampoco esa Colomba,
una parte de mi no los extraña,
la otra a veces,
cuando suena un tema, cuando veo una película,
caminando por la ciudad,
aunque más bien es nostalgia,
aquella que late en mi ADN.

Después sigo pensando y caminando, escuchando música, leyendo,
descubriendo la vida sencilla que es,
que me gusta,
la que he vivido hace casi 50 años
y por la que nunca he sentido desolación,
si la compañía de mi soledad, a solas.

El día que sienta que esa compañía es la desolación,
habrá llegado el momento de dejar de estar.

30 de noviembre de 2018

Un nuevo 30 de noviembre!!!





"... No sé a qué horas partiste / pero sí cuando dejé de sentir tu aroma / sí cuando no toqué más tus blancas y grandes manos / Eras mi príncipe amado / No hables en pasado / siempre seré, siempre estaré / aunque mis pasos, ya no dejen huella en la tierra ... "

26 de noviembre de 2018

Desvelo.

Me desperté de repente y no logré volver a conciliar el sueño. La sospecha apoderándose de mi mente, comienza hacerse certera y bueno, no están los tiempos para ello. Y sin embargo sé que estoy un  muy cansada. Pienso quizás, podría ocupar el tiempo en escribir y buscar otra vía, no lo sé.

También confieso que estoy depre por no haber alcanzado mi meta, por los no amigos,  porque constato que la gente ni  me acepta, menos valora, qué decir me vayan a querer. Me duele y lleno el alma de odio y deseos de venganza.

Sumo el constatar que la falta de cariño y los excesos, hacen que de tanto en tanto, vuelva a marginarme del mundo. Si hiciéramos un recuento cronológico de mi vida, quedarían al descubierto largos baches, en los que por opción propia, me borré destruyendo fotos, ausentandome de todo lo que me rodea.


Si alguna vez alguien repara en mi paso por la tierra, constatará que estuve, pero no tanto. Es raro o terrible aceptar ¿cómo manipulamos nuestra vida? De acuerdo a la imagen que tenemos de nosotros versus la que los demás ven. En mi caso, siento y siempre ha sido así y con los años mucho más, que en realidad nunca he existido, que la figura de la Colomba invisible, comienza hacerse constante más y más. Aquello de la marciana, inaparente. No negaré que una parte disfruta regocijada, el placer por este no ser, no verse, la cual suma a mi personalidad azotada e intensa. Tendría que preguntarle a Jerónimo ¿qué piensa él? Si le pasa igual que a mi o no. 


Escribirte aclara mil veces más mis pensamientos, que pensar y ahondar en ellos. Por un instante largo, olvidé la promesa hecha entre Jerónimo y yo. Olvidé quiénes somos y el horizonte que nos espera, en el que si lo requiere podríamos terminar con todo a los 50 o 51 años. Porque bien sabemos que no existimos en este mundo, sobrevivimos inmersos en un tiempo y espacio que no nos pertenece. Pero sabemos que nuestra esencia intensa, encontrará la salida apropiada.


Te queremos siempre!!!

10 de noviembre de 2018

A Paoletto !!!

Lo encontré entre mis recuerdos y me acordé de cuando lo escribí. Aquellos meses en el que trabajando juntos, conociéndonos de a poco, en la intensidad que me caracterizaba, por supuesto que ya estaba enamorada de ti....!!!

Sonríe mientras pronuncias mi nombre
mientras susurras Coli,
al decirme Colombita,
cuando sonríes llamándome Colito.


Escucho el terciopelo de tu voz,
mi piel se eriza,
me dan ganas de gritarlo,
que todos lo sepan,
acariciarte mientras te llamo.


Sonrío pronunciando tu nombre,
el de pila, el apodo, el diminutivo,
con el que te conocí,
el que te digo sin que lo sepas,
el que susurro cuando te vas,
con el que te sueño....


Te extraño tanto,
te busco en todos lados,
intentando percibir tú aroma,
volteó a los árboles, pensando en ti,
al cielo, rememorándote,
te siento en todas partes
y a la vez, sé que estás tan lejos,
lejos de mí.


Colomba Orrego, febrero 2018.

19 de octubre de 2018

Feliz no cumple!!!

Estás son las mañanitas, 
que cantaba el Rey David, 
a las muchachas bonitas, 
se las cantamos así..... 

Ya no despiertas mamita linda, lo sé, 
ya no miras tu bugambilia amanecer, también lo sé 
y sin embargo cada 19 de octubre, 
continuamos rememorándo
y nostalgiando este día para desearte.......... 
Muy feliz no cumpleaños!!!

Te quiero siempre, te llevo en mi corazón.

28 de septiembre de 2018

El tiempo muerto del hubiera.


Te escribo porque su misiva llegó,
todavía logra hacerme sucumbir,
aunque sé que es la reacción natural, 
que si supiera esperar o depurar, aquellas primeras horas -en tranquilidad-, 
todo volvería a su curso normal,
pero necesitaba me lo dijeras, que tu me lo dijeras.

Porque todavía emocionan sus insípidas misivas,
aun permanezco quieta con cada palabra,
acariciando y buscando un significado mayor,
por todo eso..... es que que me alejo.

Alejarme para siempre,
y quisiera que ese largo tiempo hubiera transcurrido, cosa de mirar hacia atrás y recordar algo que ocurrió décadas, siglos antes y saber que en algún momento, le dolió mi ausencia.

Si nos detuviéramos en aquel tiempo muerto, 
alojado en un reloj donde las horas no transcurren, 
diría que podría haber sido mi gran amor.

Mientras me alejo siento un dolor profundo, como si algo suyo me perteneciera y estuviera a minutos de alejarlo de mi. Entonces necesité de ti, tus consejos, saber que entiendes.  

Pienso y pienso y no dejo de pensar en nuestro parecido, es como si fuéramos un poquito  CRA, un mucho de mi, yo de ti. El doble adverso. Conforta el parecido, la cercanía. Agradezco saberte, tanto por enseñarme, el camino será largo, pero lograremos una buena y linda vida. 

Volveremos a ser aire que vuelve a los pulmones, razón a la vida, cauce a la ruta. 

4 de septiembre de 2018

Antes de irme.

He vuelto a pensar en la muerte,
en aquella que llega y con la fuerza que siento no tener,
termina con cualquier sufrimiento.

La pienso, me he dado cuenta, cada que los externos entrometiéndose en mi vida, vuelven hacerme daño.
Pero aunque la tentación de pensar muerte, llama, atrae,
la liberación de dejar el sufrimiento por aquellos otros que nunca me han visto,
va apoderándose de todo.

Antes de irme,
antes de dejar que la muerte solucione todos mis pesares,
debo dar la lucha
y en ella,
alejar lo que hace daño,
las contataciones más y más concretas que la gente que no te quiere, no debe estar a tu lado.

No es el ego de ser el centro del cariño,
pero sí el cuidado y el respeto que para mi, la amistad entrega.

No estoy pidiendo imposibles,
sí para los egoísmos e individualismos,
no para quienes conocen las reglas de la amistad,
aquello del respeto por ti y por mi.

Quizás el día que logre limpiarme de todos y todas y todes, 
los que no me han visto,
nunca existido,
entendido, comprendido,
apreciado, valorado, respetado,
quizás ese día me convierta en la Colomba más feliz del universo,
que logro lo que más o menos buscaba,
al menos y sobre todo el respeto,
rodeada de quienes me tu, tu me,
quizás ese día,
de tanta felicidad, de tanta alegría,
explote y termine en tus brazos mi querida muerte....

28 de agosto de 2018

Martes en Marte.

De amanecida,
cuando el mundo ya era martes,
comprendí y pude quedarme dormida.

Tantos años sufriendo por ser aceptada y querida,
sin razonar y entender,
que desde hace mucho soy un fantasma,
intentando entrar en sus vidas,
queriéndolos e intentando reciprocidad,
observándolos a esos ojos que a penas miran de frente,
escuchando sus tristezas y alegrías.

"No siempre recibes lo que vienes dando",
es verdad León.

Es verdad e injusto
pero en mi calidad fantasmal,
si no te miran, ni te observan, 
¿Cómo pretender te escuchen y quieran?


Amaneciendo en martes,
descubro que soy un fantasma,
visto solo por algunos y en centésimas de segundos.

Soy un fantasma percibible por centésimas de segundos.

Entonces pensaba y pensaba,
quizás nunca fue natural el buscar amigos
¿Para qué? Si soy fantasma,
Si nunca he sido vista,
menos escuchada, ni observada,
mucho menos querida.

En el espejismo del deseo me fui quedando,
mientras la intuición replicaba: "no es natural, no es natural".


Mi calidad fantasmagórica,
camina atravesando al mundo,
mirándolos, escuchándolos, pero sin dejar huella.


Soy un fantasma percibible por centésimas de segundos.

Como si nunca hubiera estado
- para ellos-,
porque existo, soy, estoy y me gusta ser y estar.


Claridad a casi cincuenta años de vida,
no es el principio de una despedida,
más bien, constatar cuánto me gusta vivir,
aunque sea como fantasma.


Soy un fantasma percibible por centésimas de segundos.

Es por eso que vuelvo al origen
y cual conjuro repito...
modifico mi entorno, otorgo poder a mi ser fantasma, que sabe estar y ser, para ser feliz.

Vida existida en soledad, sola, alone, deliciosa y exquisita,
junto a mi amigo o amiga soledad,
con quien recorro calles, mirado árboles, derejas, devidrios, deventanas y descapes,
sumando y contado historias.

De la mano con mi amigo o amiga imaginación,
observamos al mundo y a los árboles.
Junto a mis por siempre CRA, escuchamos música, tomados de la mano.


Soy un fantasma percibible por centésimas de segundos.

Continuaré mis otros 50 años o los que tengan que venir,
como fantasma, de soledades, imaginación y al lado de mis CRA,
recreando imágenes, 
leyendo y contando historias, 
mi imaginación es infinita.

Gracias martes de marte,
por enrojecer los grises que intentaban opacar.
Gracias martes de marte,
por las enseñanzas para permanecer,
en mi calidad de fantasma que le gusta tanto la vida,
Gracias marte, gracias martes, gracias amiga o amigo soledad, gracias mis CRA, gracias amigo o amiga imaginación.

25 de agosto de 2018

Hace un año.

Hace un año, 
emprendí esta aventura,
que lo fue cuando quedé mirándote a los ojos.

No soy de arrepentirme,
porque no existe la vuelta atrás
y sin embargo,
dicho una vez y silencio para siempre,
una leve sensación quedó levitando.

Un día como hoy,
hace un año viernes, 
las aguas se detuvieron,
la tierra remeciosé,
mi espíritu navegó por los ríos de nervios,
hasta que....


Confesémoslo,
reunir nuestro pasado, con el hoy, evidente aventura riesgosa,
idea mía  ¿Quién sino? 
Llámame ambiciosa por esta vez, 
¿Cómo dejarlo pasar?
Quedarnos sin rememorar los días en que tu grande y yo la aniñada,
teníamos metas por alcanzar, sueños por cumplir...
Mi sueño siempre........ tu.

Un año después,
palpita la emoción,
se trata de ti, 
al fin nos encontramos.



Te voy a querer siempre,
justo este día que sus números dan a CRA y H,
Estamos predestinados,
somos el todo, de una parte que nació unida.



Te quiero hoy,
siempre,
los quiero,
te quiero mi querido tu, 
mi querido mi tu, 
tu querida yo tu, 
los quiero.

Yo te quiero para mi,
yo te quiero para ti,
un árbol de Acacio para ti,
una Paulownia para ustedes,
Alcornoque y Jacarandá para todos.
De los altos, frondosos, verdosos, 
por los cuales trepar hasta sus copas y desde ahí..... volar, 
regresar, volar y regresar.


Te quiero siempre!!!

24 de agosto de 2018

Paseo al pasado.

Salí a pasear a mi pasado, me dejé llevar con rumbo hasta mi historia. Simplemente fui y encontréme con casi todos los primos, casi todos los sobrinos y con mis tíos sobrevivientes, viejitos y canosos. Volver a aquella casa, tan llena y tan parecida, a la esencia de la de mis abuelos. 

Recorrer sus rincones, quedarme entre sus y mis nostalgias.....liberándome a erizar la piel, sentir sus aromas, sus calideces, los planes de una tarde de estas, un día quizás. 

Llené el momento de imágenes, recuerdos, historias, descape, derejas, devitrales, de los abuelos.... viajé y viajé a ese pasado, parte mío, compartido con elles, vivido junto a mis Titin y Marta.
Respiré y respiré, esperando inmortalizarlo todo, todes, todo, por siempre jamás.


El cielo nublado, el viento frío volando, levantando hojas y tierra, enmarcó este día en uno sin fecha, sin tiempo, en el que para volver - de tanto en vez-, solo cuando contemple estas imágenes.

8 de agosto de 2018

!!! ... H ... !!!


Somos esencia,
ustedes la mía, lo que soy la suya.

Un lazo de encaje, va rodeando mi corazón, el que late y late por ti, por ellos, por nosotros, los CRA, los H, los R, RJ, A.

Lazo avinculado que no se diluyó en el tiempo, la constatación 32 años.

Seguimos por siempre, infinito, siempre, siempre, fortaleciéndonos en vida, en la vida de la CRA, que nos alimentará siempre.

Los amo, te amo!!!

7 de agosto de 2018

... ¡¡¡ H ¡¡¡ ....

Querido mío,
Adoro que caiga en martes, mi martes, tu mío, nuestro, los dos. Anoche llovió y el día amanece despejado a rabiar, con los azules y blancos prístinos maravillosos.... para ti, para nuestro 7.

Pensaba en hace 32 años, en ese hoy de ayer que cae martes actual  me pregunto ¿Qué día habrá sido hace tantos, tantos años?

Mientras hacía los dibujos, pensaba en la intensidad que significa para los dos, estos tres días y que pese a la cantidad de tiempo transcurrido, sigamos presentes, como con Ricardo, RJ, A, no es fácil, sabrás bien, nada fácil conjugar tantas vidas, de nosotros tantos diversos, distintos, en diferentes latitudes y sin embargo, continuamos siendo CRA por siempre.

Somos la consagración de la verdadera amistad, los amores sinceros, los vínculos para siempre. Mis únicos para siempre posibles, que jamás dejaron de ser, de estar, que no diluyerónse en las circunstancias individuales de la  vida. Agradezco, te lo agradezco, se los agradezco, nunca será lo mismo la vida con ustedes, que sin.
Por siempre H, por siempre CRA, por siempre los amaré !!!

6 de agosto de 2018

... H Siempre!!!


Y en tu nombre,
hoy publiqué la historia del "Ombú", hermoso árbol, que conocí en nuestro amado Buenos Aires.
Te quiero siempre, te quiero mucho, te quiero, te quiero !!!

2 de agosto de 2018

Sucedáneo todavía.

Intenté escribir todavía,
deletrearla, pensarla,
comprendí que ya no.

Ya no es tal.

Por un instante me pudo,
un algo corrió veloz,
diseñando imágenes,
enchinando pieles,
cerrar los ojos y volar.

Ya no hay imágenes.

Llegar a ese instante,
en el que más que todavía,
estabas.

Ya no es tal,
no hay imágenes.

Sucedáneo de todavía,
intentar recordar,
recuperar el hálito de nostalgia,
a la que no se vuelve.

De la mente,
hasta el vaho al que no se vuelve, 
por la nostalgia de sentimiento,
que quedó sin ruta.

Ya no es,
no hay imágenes.

Simplemente,
no es malo,
pero tampoco bueno,
simplemente.

Ya no es tal,
no hay imágenes,
ya no es.

26 de julio de 2018

Cinco años: Las camelias de mamita.


Cuando se murió mi papá, a mi madre le regalaron en esa costumbre tan especial y simbólica, una planta joven y viva, a cambio del ser querido que ya no estaba. Así llegó la Camelia a casa, que además no se trataba de una plata cualquiera. Pensando en por quién fue regalada, era la flor de su amada y tuberculosa, Greta Garbo, en “la dama de las camelias”; en versión México, tiene canción y entre la variedad de ésta planta, hay una que no flora y en cambio, sacan sus hojas para hacer té. Aquél líquido que tanto placer le daba a mí padre y que preparaba muy a su estilo, semejando más bien, a las turbias y espesas aguas en las que vive Ness.


El mismo año que partió papito, pero cinco meses después, sumó al listado de ausentes, el Tío Pino, hermano de mi madre. Él, además de muchos quehaceres que hizo en su vida, dedicó gran parte de ella, a criar, cultivar y cuidar Camelias. En su casa de Reñaca y después en Ritoque, lucían desde su patio interior, las más hermosas de la comarca. Ya fueran flores en tonos rosados, blancas, rojas, pintitas rojas, pintitas rosadas y las exóticas blancas. A las cuales tenía apostadas en graderías, cual si esperaran el show, que se producía cuando mi tío en las mañanas y al regresar del trabajo, salía a verlas tocándolas cuidadosamente para limpiarlas, podarlas y regarlas.


No por nada mi abuela materna, la “Ita”, campanita en mano salía al patio hacer sonar el tilín, tilón, sobre cada flor, cada árbol y por supuesto cada camelia. Ese gesto de amor y devoción a por lo verde, que es tan íntimo y personal, como el que sienten los orientales por sus bonsái.


Con el tiempo y lecturas sobre Camelias, sumado a que heredé la labor de cuidar, podar y regarlas, sabríamos que estas flores son por siempre jamás de julios y agostos. En lo personal, prefiero creer que mi mamá desde el cosmos, manda parabienes para que florezcan y florezcan. Ya que después de la buganvilia, se transformó en la planta que más quería, seguramente por todo lo que les conté. Y así, ansiosa esperaba el llegar del invierno y con él, el momento en que los botones, hinchados de vida, explotaban en rojos y rosados.


En este julio 2018, que hoy jueves 26, suman cinco años desde que mi madre partió, mi sisterna Manucita y yo, pondremos sobre la lápida que reúne a mi papá, abuelos, mi hermano Andrés y a mi mamá, un ramillete de Camelias, con hartas hojas verdes, para que mi papito prepare un té a lo Lago Ness para compartir, mientras mi mamita, evocará el estar en su habitación, donde puede mirar a Camelia la tejana, enflorecida en rojos intensos.


11 de julio de 2018

Blanquita en Julio.

Blanquita en julio,
aunque también en octubre,
en el séptimo mes del año,
cuando los fríos acechan,
a veces las lluvias
y al día siguiente, puro aire puro y cordillera de blanquita blanca.

Julio en Blanquita
y Blanquita en Julio,
hace cinco años no fue un mes agradable,
pese a que ese mismo día, no sé si a la misma hora,
celebrábamos la revolución cubana
y es que a las seis de la tarde,
cuando el sol entraba por la ventana, irradiando con su tenúe luz tu cuerpo,
éste ya no latía,
ya nunca más,
porque ya no estarías nunca más.

Te fuiste en julio
y lo dejaste impregnado de Blanquita,
fuera invierno,
cruzar el charco y vivirlo en verano,
siempre, 
para siempre jamás,
serás julio de Blanquita Blanca.

Es en este momento,
en que el corazón se aprieta,
tristezas inexplicables,
de no saber por qué ahora,
de dónde viene la pena,
justo ahora,
es que está llegado Julio,
Julio de Blanquita,
Blanquita en Julio,
recordando una vez más que ya no estás.

Entonces, es momento de quedarse con la nostalgia,
una vez más como cada que el círculo llega a este mes,
rememorar esa tarde de invierno, 
frío y lluvioso copioso
y al mismo tiempo acompañándonos en el sentimiento.

Sentimiento de sentir desolación,
soledad, sin un lugar en el mundo,
un lugar posible en el mundo donde sentirse parte de,
certeza de ausencia,
desolación, soledad, ausencia,
Julio de Blanquita,
Blanquita en Julio.


El mes en el que la tristeza aumenta,
junto al apachurramiento del alma,
la respiración falta,
el aire huele a pena,
la lluvia conjuga belleza y tristeza,
el frío nos abraza con nostalgia,
aquella luz, de aquel día vuelve a instalarse en la cúpula, 
atravesándose,
ya no tiene donde yacer,
no está más ese cuerpo, de aquella cama, junto a la ventana, esperando la señal de las seis en punto y los tenues rayos entrar y posarse sobre ti.

La imagen vuelve una y otra vez,
cerrar los ojos y encontrarla,
abrirlos para pensarla,
sentir esa tarde fría, lluviosa.

Desde ese día hace cinco años,
estás allá en ese lugar quién sabe cuál sea,
junto a los abuelos, mi papá, los amores queridos, Quetzi, Gregorio, Cuchi, Escobita, Gremnlin, Atila.


Para nosotros solo las certezas de los julios en Blanquita Blanca,
de Blanca Blanquita de Julio.....