11 de agosto de 2015

Tu notebooke.

Querida mamita,
Ahora que estoy convaleciente, estoy usando nuevamente tu computador, como cuando se murió el mío y tu tan generosa me lo prestaste. Me acuerdo tanto de los viejos tiempos cuando comenzaba a trabajar con él y me equivocaba en las correcciones ortográficas, el teclado se me hacía chico, incómodo y puse una extensión. Ahora estoy en las mismas, pero la historia ya recorrida con él, me ayuda para no equivocarme más.
Sería tanto más bonita toda esta historia, si pudiera darte las gracias personalmente....

No hay comentarios.: